- Evangelio Juan 18, 33-37 En aquel tiempo, preguntó Pilato a Jesús: "¿Eres tú el rey de los judíos?" Jesús le contestó: "¿Eso lo preguntas por tu cuenta o te lo han dicho otros?" Pilato le respondió: "¿Acaso soy yo judío? Tu pueblo y los sumos sacerdotes te han entregado a mí. ¿Qué es lo que has hecho?" Jesús le contestó: "Mi Reino no es de este mundo. Si mi Reino fuera de este mundo, mis servidores habrían luchado para que no cayera yo en manos de los judíos. Pero mi Reino no es de aquí". Pilato le dijo: "¿Conque tú eres rey?" Jesús le contestó: "Tú lo has dicho. Yo soy rey. Y mi misión consiste en dar testimonio de la verdad. Precisamente para eso nací y para eso vine al mundo. Todo el que pertenece a la verdad escucha mi voz".
Investigando un poco descubrí que la solemnidad de Cristo rey era hace muchos años, una fiesta importantísima para la Iglesia, con celebraciones populares, procesiones, Misa en la catedral, etc. Parece ser que con el tiempo, esta celebración comenzó a perder fuerza, tal vez porque la figura del Rey, es para nosotros algo lejano. En España por ejemplo, esta fecha convoca a los fieles por miles, tal como sucede con la fiesta de los reyes magos, obviamente allí la imagen de un rey está mucho más cerca de la realidad popular.
A veces como católica temo que de a poco vayamos dejando de lado hermosas tradiciones y solemnes fiestas, creo que empieza a dejarse ver esto en Corpus Christi por ejemplo, aunque espero que no deje nunca de celebrarse es obvio que las misas y procesiones ya no son las de antaño.
Está buenísimo que nuestra amada Iglesia busque actualizarse y renovarse, porque está viva, pero también las tradiciones, partiendo de aquellas que los apóstoles nos dejaron, nos dan vida. Ojalá seamos capaces nosotros de transmitir correctamente el amor por aquellas cosas sagradas, solemnes y tradicionales sin que por eso tengamos miedo de que nos crean "chapados a la antigua" o "aburridos". Yo amo especialmente esta solemnidad casi dejada de lado, nada me parece más bello que la idea de un Cristo que sea Rey de nuestras vidas.
Em C
el es el rey infinito en poder
Em C
el es el rey de los cielos
Em C
sere para el siervo fiel
G D
pues mi vida compro con su amor
Em C
el es el rey lo confiesa mi ser
Em C
el es el rey de los cielos
Em C
mi vida la rindo a sus pies
G D
el es rey sobre mi corazon
El
G D
el es el rey de mi vida
Em D
el es el rey, el es el rey
G D
reina con autoridad
C D
su reino eterno es
Em D
su trono cielo es
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